11 de Junio 2020 – 18:30 h.

Las sociedades democráticas se encuentran inmersas en un creciente proceso de politización. La movilización política en torno a asuntos altamente divisivos se ha traducido en un cuestionamiento de los pilares fundamentales de nuestros sistemas políticos, cuando no en la polarización de las sociedades que habitamos. Proyectos ideológicos antagónicos generan actualmente una confrontación creciente en sociedades que ven aparecer nuevas brechas por razón de disparidades socio-económicas, las migraciones, el rechazo a las instituciones políticas tradicionales o el encaje territorial.

A menudo, estas dinámicas divisivas revierten en una simplificación excesiva de realidades crecientemente complejas, bajo la forma del populismo y pueden derivar en procesos de involución que ponen en peligro las bases de las democracias liberales. Con frecuencia, el debate pausado y constructivo entre posiciones políticas antagónicas se erige como primera víctima en un clima de constante polarización. Crece la confrontación y se reduce la de concertación. La calidad democrática de nuestras sociedades e instituciones se degrada y, con ello, la posibilidad de avanzar en diálogos constructivos que aborden eficazmente las preocupaciones actuales de las sociedades democráticas.

La confrontación política y la retórica proteccionista de Trump a raíz de la Covid-19 se han convertido en factores adicionales de polarización en la sociedad norteamericana, dividida entre detractores y seguidores de Trump. La polarización derivada de la gestión de la pandemia se suma a cuestiones como la inmigración o la confrontación con China y puede ir en aumento a medida que se acerquen las elecciones de noviembre. Para abordar el caso estadounidense, esta sesión contará con la participación de Pau Solanilla, consultor senior asociado en Ideograma, y Julia Roig, presidenta de Partners Global, Washington DC, y estará moderada por Pol Morillas, director de CIDOB.